Los tubos torácicos, también llamados drenajes, se colocan en la sala de operaciones después de la cirugía para eliminar el aire y el líquido del área entre el pulmón y la pared torácica.Generalmente dejamos un solo drenaje pleural. 

Estos se sacan después de unos días, en la mayoría de los casos, dependiendo de las características del líquido que sale o si hay fuga de aire, pudiendo dejarlos por más tiempo. El drenaje no le impedirá moverse, levantarse o bañarse en ningún caso. 

Le harán radiografías de tórax frecuentes para controlar sus pulmones después de la cirugía.

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En raras ocasiones, los pacientes serán dados de alta del hospital con un tubo torácico restante todavía en su lugar. Estos pacientes son atendidos semanalmente en la clínica de cirugía torácica hasta que se extrae el tubo torácico.

 

Sonda vesical o Catéter urinario

Se colocará un catéter en su vejiga durante la cirugía para permitir que se vacíe, ya que esto a veces es difícil inmediatamente después de una operación. Esto se sacará en la sala de operaciones salvo raras excepciones.